Omisión de socorro a personas en peligro y riesgo de muerte: La extrema derecha acude en apoyo de la política europea de control de fronteras

“Colaboración con los traficantes”, creación de un “efecto llamada”, “poner en peligro a las personas migrantes”: hace meses que las organizaciones que intervienen en el Mediterráneo salvando vidas son atacadas por la magistratura italiana, la agencia europea Frontex y, recientemente, por la extrema derecha europea.

A finales de 2016, la agencia Frontex y el consorcio militar europeo Eunavfor Med abrieron camino a las críticas en dos informes internos en los que acusaban a las ONG de salvamento de colaborar con los traficantes. En abril de 2017, el fiscal de Catania (Italia) en base a dichos argumentos intentó procesar a algunas de estas ONG, para acabar reconociendo la falta de pruebas que sustentaran esta “hipótesis de trabajo”. Un mes después, en mayo de 2017, un barco de la asociación alemana Sea Watch fue atacado por los guarda costas libios con el objetivo de llevar a las personas rescatadas a centros de detención en Libia. A las pocas semanas, la extrema derecha europea lanzó una deplorable operación de recogida de fondos con el objetivo de financiar operaciones marítimas para “defender Europa” e impedir que los barcos de las ONG respondan a las obligaciones internacionales de salvamento en alta mar.

El hecho es que a finales de 2015 surgieron varias iniciativas privadas y de asociaciones como respuesta a la decisión de la Unión Europea de no actuar, obsesionada con el “efecto llamada”. Hoy, “Culpar a los socorristas” y usar un “discurso falaz” para desacreditar la acción de las ONG parece ser la prioridad de quienes quieren cerrar las fronteras a cualquier precio, aunque sea a costa de los miles de boat people que tratan de hacer valer sus derechos. Quienes se implican en salvar a las víctimas de esta omisión de socorro se someten al oprobio público, y se convierten en el blanco de campañas de descrédito. Las que realizan estos grupúsculos de extrema derecha retoman la retórica de las instituciones y los gobiernos, que llevan a cabo desde hace años una “guerra contra las personas migrantes”, rehuyendo cualquier obligación “humanitaria”. Cada vida salvada en el mar supone una brecha insoportable en las barreras levantadas en el camino de las personas en busca de protección internacional. La extrema derecha, con exageraciones racistas y ataques a las ONG de rescate en el mar, defiende una política de abandono ante la muerte practicada desde hace tiempo por los estados miembros de la Unión Europea.

El 14 de Junio de 2017

Contacto de prensa: contact@migreurop.org

Foto: Canal de Sicilia, Sirios rescatados durante la operación Mare Nostrum.
(c) Sara Prestianni, 2014