Para la rehabilitación del derecho de asilo. Reconocimiento de los derechos fundamentales para todos
El 20 de junio, la ONU celebra el día internacional del refugiado. Con este motivo, el Comité de seguimiento de la Conferencia no gubernamental euro-africana constata amargamente que no solamente ningún progreso se ha visto desde hace un año en cuanto al respeto de los derechos fundamentales de los migrantes y la rehabilitación del derecho de asilo, pero que, al contrario, los derechos de las personas migrantes se reducen aún más cada día, a medida que se refuercen las legislaciones de seguridad a carácter xenófobo, que se basan en una estigmatización del extranjero como amenaza, y que se multipliquen las expulsiones masivas y la caza mortífera a las pateras y otras embarcaciones de fortuna. Por lo tanto, los principios de solidaridad contenidos en los textos de referencia internacionales se obstruyen completamente, en favor de un enfoque egoísta, chauvinista, utilitarista y “securitario” de las relaciones entre los hombres y de una sumisión de los órganos internacionales, y muy especialmente del ACNUR, a los intereses de algunos Estados.
En este día 20 de junio, la Conferencia euro-africana no gubernamental Migraciones, derechos fundamentales, libertad de circulación, desea renovar su llamamiento a una rehabilitación del derecho de asilo, diariamente vulnerado por los obstáculos a la libre circulación de personas, las restricciones aportadas de jure y de facto a la protección de los refugiados y exiliados, en particular por la desvirtuación de las funciones del ACNUR, los acuerdos de readmisión en cascada, el refuerzo de las medidas de seguridad, y muy especialmente el sistema Frontex, así como la subcontratación de las solicitudes de asilo y el control de las fronteras.
Esta rehabilitación del derecho de asilo pasa por:
1) la renuncia a la ideología “securitaria” y represiva que orienta hoy en día las políticas migratorias, en particular, "a la externalización" del asilo y los controles en las fronteras, a la criminalización de las migraciones, así como a toda ley racista, xenófoba o discriminatoria;
2) la refundación de las políticas migratorias sobre la base del respeto de los derechos humanos, de una verdadera igualdad de los derechos de las personas que viven en un mismo territorio y, por ahora, de la regularización de todos los migrantes sin papeles;
3) la despenalización del delito de estancia irregular y la ayuda a las personas obligadas a este tipo de estancia;
4) la anulación de los acuerdos de readmisión de personas expulsadas y el abandono de toda negociación en este sentido por los Estados;
5) la supresión de los visados de corta estancia, de todos los obstáculos colocados a la salida de un territorio, y la justificación enumerada y controlada de las denegaciones de visados de establecimiento con una estricta simetría de las condiciones africanas y europeas de expedición de este tipo de visados;
6) el cierre de todos los lugares de encierro y otros dispositivos de bloqueo de las personas en las fronteras;
7) la abolición de todas las medidas que suponen un obstáculo a las posibilidades de reagrupación familiar;
8) la aplicación completa y sincera de todos los instrumentos de protección internacional con el fin de no reducir el derecho de asilo a una simple ficción;
9) la concesión sistemática a todos los refugiados estatutarios de una completa libertad de circulación e instalación y de una protección a través del mundo;
10) la refundación financiera y jurídica del ACNUR de tal modo que proteja efectivamente los solicitantes de asilo y refugiados y no los intereses de los Gobiernos que lo financian;
11) la ratificación del Convenio internacional sobre la protección de los derechos de todos los trabajadores migrantes y de los miembros de su familia, su integración en las leyes nacionales, la ratificación de los convenios de la Organización Internacional del Trabajo, y, en particular, los convenios 143 y 97 así como su puesta en marcha.
12) la necesidad que toda negociación euro-africana se base en el principio de igualdad de los interlocutores y que los dirigentes africanos, que así defendieron poco los intereses de sus poblaciones, asumen plenamente sus responsabilidades, muy especialmente poniendo en entredicho los acuerdos de asociación euro-africanos.
13) la instauración de mecanismos de soberanía alimentaría y la supresión de los acuerdos que hipotecan el futuro de la agricultura africana;
14) la supresión de las condicionalidades impuestas a los países africanos en las negociaciones internacionales, y muy especialmente la de la subcontratación de la lucha contra las migraciones;
15) la anulación incondicional de la deuda de los países del sur así como la repatriación de sus bienes colocados en bancos extranjeros.
En este día del 20 de junio, la Conferencia euro-africana no gubernamental Migraciones, derechos fundamentales, libertad de circulación reafirma que toda política de recepción sólo debe concebirse sobre la base del principio de la igualdad de los derechos (políticos, sociales, económicos y culturales) para todas las personas que viven en un mismo territorio, y que permanece movilizada junto con los refugiados y los exiliados, para el reconocimiento pleno y completo de estos derechos universales.
Rabat, 20 de junio del 2007